¿Has pensado alguna vez en hacerte un blanqueamiento dental? ¿Crees que una pasta de dientes blanqueante podría darte el mismo resultado? Hoy te contamos las diferencias entre un tratamiento y otro para que decidas cuál se adapta mejor a ti.
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Diferencias entre el blanqueamiento dental y la pasta blanqueante
Lo primero que debes saber es que ambas opciones utilizan como ingrediente base el mismo componente: el peróxido de carbamida o el peróxido de hidrógeno. ¿El motivo? Cuando se descomponen consiguen que el oxígeno que hay en el esmalte dental se aclare. Sin embargo, cada alternativa emplea estos compuestos químicos de una forma más o menos eficaz.
Características del blanqueamiento dental
Los blanqueamientos de dientes emplean concentraciones que llegan al 6 % de peróxido de hidrógeno (en el caso de que sean de peróxido de carbamida pueden superar el 18 %). Por ello, son altamente efectivos. Solo pueden realizarse tras un análisis bucodental previo de tu dentista. Él será quien valore la conveniencia o no de este tratamiento en función de tus características. Una vez haya dado su visto bueno, será el encargado de aplicarlo y con ello garantizar tu seguridad.
Existen varios tipos de blanqueamiento dental. Los dos más básicos serían:
- Con lámparas de luz led en consulta. Con esta opción puedes aclarar hasta ocho tonos tus dientes en tan solo dos sesiones de 45 minutos.
- Tu dentista puede hacerte a medida unas férulas dentales para que seas tú mismo quien te apliques el blanqueante en casa. Esta opción suele durar una media de dos semanas dependiendo del paciente y del resultado que pretenda obtener.
Eso sí, si llevas carillas, fundas o empastes no resulta válido. Solo funcionará sobre tus dientes.
Es un tratamiento indoloro en la mayoría de casos. Si tienes hipersensibilidad, coméntaselo a tu dentista para evitar que se produzcan pequeñas molestias durante su aplicación.
Características de las pastas dentífricas blanqueantes
Ahora bien, los dentífricos catalogados como blanqueantes solo llevan un 0’1 % de peróxido de hidrógeno (0’3 % si es de carbamida). Con ello, los fabricantes pretenden evitar que se produzcan problemas como hipersensibilidad o incluso quemaduras. En consecuencia, no llegan a resultar tan efectivos como un blanqueamiento profesional.
Además debes tener en cuenta que, si bien este tipo de pastas pueden ayudarte a eliminar las manchas más superficiales, pueden llegar a alterar el tono de tus dientes. A mayor nivel de abrasión, mayor será la blancura que consigas en tus dientes. A cambio, verás cómo se incrementa tu sensibilidad dental por el deterioro que han provocado en tu esmalte.
No obstante, si te has realizado previamente un blanqueamiento en tu clínica dental, puedes usar la pasta como complemento para mantenerlo durante más tiempo.
En definitiva, un blanqueamiento dental siempre será más efectivo que una pasta blanqueante por la mayor concentración de peróxidos que utiliza. Para resolver tus dudas lo mejor es que acudas a tu dentista. Te aconsejará cuál es el tratamiento que más se ajusta a tu idea y tendrás la seguridad de estar en manos de un especialista.