El verano ya está aquí y los más pequeños de la casa han comenzado ya sus más esperadas vacaciones. Durante este período, muchas veces nos relajamos y somos menos estrictos en cuanto a normas y hábitos con nuestros hijos puesto que sabemos que es importante que disfruten del verano como se merecen.
Sin embargo, debemos mantener siempre determinadas normas y hábitos que, de no seguirse, pueden afectar a la salud de nuestro pequeño sin que nos demos cuenta. Uno de los ámbitos al que debes prestar mayor atención es el de la alimentación en verano.
La alimentación y la salud bucal infantil están directamente relacionadas. La tendencia hacia un mayor consumo de dulces como helados o golosinas que se da en verano puede favorecer la aparición de caries en los niños, por lo que es muy importante mantener una correcta prevención dental infantil.
Entre los alimentos recomendables para evitar la aparición de caries destacan las frutas y, especialmente, la manzana. Esta fruta, por su composición, se convierte en un gran aliado a la hora de mantener una salud bucodental adecuada pues, al masticarla, su acción es similar a la de un cepillo de dientes. De este modo, se convierte en una gran opción para mantener un aporte de fibra importante y, a su vez, evitar la aparición de caries en nuestro pequeño.
También es importante introducir verduras en la dieta del niño. Las zanahorias y el apio son dos alimentos que ayudan a prevenir la aparición de caries y que, además, aportan una gran cantidad de nutrientes beneficiosos para la salud.
El queso es otro producto adecuado puesto que tiene la característica de neutralizar la acidez en la boca. Por ello, un poco de queso en el postre puede ser de gran utilidad para prevenir la aparición de caries en nuestro pequeño.
Además, no debes olvidar la importancia de la bebida. Evitar el consumo excesivo de bebidas con azúcares añadidos es importante, por lo que una buena alternativa a los refrescos son los zumos naturales.
Las gominolas, caramelos y chocolatinas pueden parecerle deliciosos a tu hijo/a, pero son productos que afectan negativamente a su salud bucal por su alto contenido en azúcares. Aunque no pretendemos que prohíbas al niño/a consumir estos alimentos, sí es necesario que vigiles en qué momento los consume, reservándolos para determinadas ocasiones y no permitiendo que los consuma cuando quiera.
Pero, además de la alimentación, también hay un hábito esencial que no debes olvidar: la importancia de lavarse los dientes. Definitivamente, mantener una especial atención sobre la higiene bucodental de tu pequeño/a es la forma más efectiva de prevenir la aparición de caries. A pesar de todas estas recomendaciones, también es importante acudir al dentista con frecuencia.